La Salmonelosis representa la principal causa de intoxicación alimenticia por la que los usuarios llegan a un centro hospitalario. En verano los afectados por esta bacteria aumentan de un modo exponencial.
El motivo principal es que dos de las causas de su proliferación son, la falta de higiene que representa un caldo de cultivo optimo para la proliferación de la Salmonelosis.
Esta bacteria presente en la piel de algunos animales y en determinados alimentos crudos que han sido tratados con aguas insalubres o han tocado el suelo es una de las más dañinas. La forma de evitar su contagio es sencilla, una correcta higiene de los alimentos y de las personas que los manipulan. No lavarse las manos es una de las causas más probables de contagio y de proliferación.
Los alimentos también deben tener un cuidado especial de limpieza y acondicionamiento, no deben estar expuestos al sol directo ni a las inclemencias de los elementos externos.
El período de incubación de esta bacteria oscila entre las 12 y las 26 horas. Los síntomas son claros y molestos, vómitos, diarrea, fiebre, dolor abdominal y nauseas. Se recomienda asistencia médica y una correcta hidratación del cuerpo.